El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro, sostuvo un encuentro fraterno con pastoras y pastores cristianos en un acto de acción de gracias y por la paz del país.
La emblemática Plaza Bicentenario del Palacio de Miraflores fue el escenario elegido para este significativo encuentro, donde líderes religiosos se congregaron para ratificar a Venezuela como una Nación bendecida y libre, bajo la protección divina del Todopoderoso.
El jefe de Estado venezolano manifestó ser un hombre de oración y reflexión, compartiendo ese sentimiento con los representantes cristianos presentes. Maduro ha destacado la importancia de escuchar y aprender en cada momento de encuentro espiritual.
En línea con su enfoque de reflexión y acción, el Presidente señaló: «Soy un hombre de reflexión, pero también de acción, como debemos ser. El amor de Dios en acción, el poder de Dios en acción. Oración, reflexión y acción permanente son fundamentales«.
Durante el evento, se hizo hincapié en que Venezuela se encuentra preparada física, material y espiritualmente para encarar los desafíos venideros, augurando un futuro promisorio para todos los ciudadanos y ciudadanas del país que ya están avanzando en su desarrollo.
Acompañando al Mandatario nacional en esta ocasión estuvieron la Primera Combatiente de la República, Cilia Flores; el Vicepresidente de Asuntos Religiosos del PSUV, Nicolás Maduro Guerra; y el Jefe de Gobierno de Caracas, Nahum Fernández, junto a otras autoridades del Gobierno Bolivariano. En este emotivo acto se compartió una oración de bendición y el Presidente ofreció palabras de aliento y esperanza para todos los presentes.